Francisco Sainz de la Maza Ruiz, burgalés de nacimiento y catalán de adopción, dedicó toda su vida a sus dos grandes pasiones; la pintura y la enseñanza. El resultado de las mismas lo muestran las más de 300 obras entre óleos, acuarelas y dibujos repartidos por distintas colecciones tanto en España como en el extranjero, así como los más de 500 alumnos que a lo largo de sus 50 años de enseñanza pasaron por su academia de dibujo y pintura.
Nacido en el seno de una familia castellana fue el tercero de seis hermanos, tres de ellos, Regino, Eduardo y Mariano, dedicaron su carrera a la música mientras que Francisco se dedicó a la pintura.
Con tan sólo 10 años Francisco inició su formación en San Sebastián como discípulo de los pintores Alejandro Irureta y Rogelio Gordón para posteriormente, en 1915, ingresar en la escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando en Madrid, donde cursó los estudios oficiales.
En 1918 completó su formación en el estudio del pintor y pedagogo Ignacio Mallol en Barcelona, ciudad donde fijó su residencia y desarrolló su carrera profesional. En 1927 estableció su escuela de dibujo y pintura, en la que se iniciaron gran número de artistas y arquitectos de renombre internacional, siendo la gratitud que sintieron sus alumnos por él uno de los mayores reconocimientos para Francisco Sainz de la Maza. A lo largo de su vida participó con gran éxito en múltiples exposiciones siendo reconocido con diversos premios y encargos públicos.
Respecto al ámbito familiar, se casó en 1929 con la catalana Mª Luisa Lasoli Trías con la que tuvo tres hijas: Mª Luisa, Mª Victoria y Regina.
Falleció en 1984 después de una vida dedicada a la pintura y a la enseñanza.